entrada, parece una foto inocente y hasta divertida. Pero, de lo anterior, nada que ver.
La imagen que acompaña esta historia ha provocado la indignación y el repudio de miles de usuarios en redes debido a la insensibilidad que carga.
Es conocido que las violaciones de mujeres y niñas en India consternan, no solo por el crimen en sí, sino por la impunidad que rodea los casos.
Una mujer de 30 años, de Alwar, Rajasthan, fue violada por su esposo y los hermanos de éste porque no les pagó el dote de 51,000 rupias (más de $750,000).
El grupo tatuó a la mujer en los brazos y en la sien para humillarla. Sin embargo, como el esposo estuvo involucrado en el ataque, las autoridades determinaron que no se trató de una violación, por lo que los agresores se libraron de cargos.
Funcionarias de la Comisión de la Mujer del estado de Rajasthan fueron a visitar a la víctima el 29 de junio en la estación de policía.
Pero más allá de escuchar a la víctima, las funcionarias Suman Sharma y Somya Gurjar se tomaron selfies con la chica, algunas en las que Sharma incluso muestra a la cámara el brazo tatuado de la mujer.
Como era de esperarse, la comunidad virtual ha tronado contra el dúo, luego de que la foto trascendiera a redes vía WhatsApp.
Gurjar renunció a su puesto un día despues de que trascendiera la instantánea, luego de que el jefe de la comisión la penalizara por el “insensible acto”, informó The Economic Times.
“Yo estaba grabando las imágenes, pero la víctima se mostró interesada en la cámara y me preguntó qué era. Yo le dije que era una cámara. Ella me pidió que le tomara una foto a ella también. Yo se la tomé para que se sintiera cómoda y porque ella lo pidió. Estaba tratando de ser humana con ella”, sostuvo Gurjar.
Sharman – quien le pidió a la renunciante que reaccionara al incidente mediante una carta pública- se mantiene en su puesto.
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